Cuando queremos comprar una televisión, pongamos de la marca Samsung, podemos ir a una gran superficie, por ejemplo a Carrefour.
Allí mismo, cerca de casa, podemos adquirir la tele y llevárnosla a casa. El centro comercial está cumpliendo una función muy importante para nosotros y que ahorra costes al fabricante: facilitar el transporte de los productos desde las fábricas, en China, hasta la tienda de cerca de nuestra casa.
Además, el hecho de que esté disponible en el punto de venta y nos la podemos llevar de inmediato tambien es una gran ventaja para nosotros. Es la función de almacenamiento.
De paso que vamos al Carrefour podemos aprovechar el viaje para comprar comida o productos de limpieza, todo en un solo punto, reduciendo los desplazamientos. Es la función de surtido.
Si necesitamos financiación, podemos usar la tarjeta pass y pagar a 10 meses sin intereses.
En la sección de electrodomésticos podremos preguntarle dudas sobre los productos a algún vendedor, que nos ayudará en nuestra decisión. Es la función de asesoramiento.
Puede hacer aún más servicios añadidos como la entrega a domicilio, la instalación, la gestión de la garantía en caso de problema técnico.
Todos estos servicios tienen un valor para el cliente, y ayudan al fabricante a vender más y a ahorrar costes. Por eso Carrefour recibe una parte importante del valor de venta de la televisión.
Piensa en la opción de comprar la televisión a través de Amazon, ¿cumple exactamente las mismas funciones y de la misma forma?